La historia se descompone en imágenes, no en historias.
Walter Benjamin
Siempre, ante la imagen, estamos ante el tiempo.
Georges Didi-Huberman
Llega un momento en que la conciencia del paso del tiempo se acrecienta con la evidencia de la desaparición: de los maestros, los familiares, los amigos, e incluso de un mundo; un momento en que ni la mente ni el cuerpo pueden alcanzar lo que ven alejarse sin remedio, “como un buque que va deslizándose por el borde del muelle”. Hallándose en tal circunstancia, el narrador de la falsa autobiografía de Félix de Azúa hace inventario de recuerdos, de las imágenes que guarda, sin las cuales “el tiempo se haría invisible y podría recorrerse todo él en un guiño”. Busca especialmente las imágenes de su entrada en la edad de la razón, aquellas que responden a la pregunta: ¿cómo empecé a saber lo que sé? Es su gesto iniciático ante la muerte; el último comienzo.